"Ángel de la guarda, dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día..."
¿Sabías que... los Ángeles existen? Te cuidan, te protegen y sirven para animarnos la vida cuando las esperanzas acaban.
Cuenta la leyenda que hace miles de años unos duendes que compartían amistad con los Ángeles, tuvieron que huir del bosque donde vivían en busca de un lugar alejado, por ello los Ángeles como símbolo de protección les regalaron unos cachivaches que solo ellos podían llevar colgados.
Los Ángeles explicaron a los duendes que siempre que se viesen desprotegidos o en peligro debían de agitar la bola y ellos acudirían para protegerles.
Los duendes que en más de una ocasión tuvieron que utilizarlo decidieron de llamarlos "llamadores de Ángeles".
El sonido que desprende el llamador de Ángel atrae a las energías angélicas para que puedas sentir su protección, apoyo y amor a tu lado.
Puedes colocar el llamador de Ángel en la mano y meditar en silencio. Realizando un pequeño movimiento convoque a los Ángeles emitiendo un suave sonido con el llamador de Ángel, hable con ellos, pregúntales y anote las respuestas. Relájese y confíe en lo primero que le venga a la mente. Este es un acto de fe y confianza.
En la India y otros países las mujeres embarazadas llevan los llamadores de Ángeles a la altura del ombligo para proteger al bebe de cualquier negatividad externa, incluso de los shoks o traumas que pudieran sufrir la madre. Por lo que es un regalo ideal para futuras mamas, el suave tintineo calma al bebe que lo escuchará, y una vez que nazca este sonido le recordará cuando estaba en el vientre materno, lo relajará y le ayudara a dormir.
Los llamadores de ángeles (también conocidos como bolas de la armonía) son muy especiales. Lo puedes llevar como colgante a la altura del chakra del corazón, o como llavero, o en algún lugar de la casa suspendido para que vibre con la brisa, o como quieras. El sonido armonioso atraerá a los Ángeles por la transmisión de vibraciones. Y te traerá suerte en el trabajo y en la salud....
También los Ángeles son invocados por aromas de flores, incienso, uno de sus aromas preferidos porque ahuyentan energías negativas y les limpia el camino.
Además en la comunicación con los Ángeles se utilizan piedras semipreciosas o gemas. Para esta creencia se toman los relatos de las visiones de los profetas y del evangelista Juan, donde se mencionan distintas gemas que componen los tronos, cuerpos y atributos de los Ángeles.
Para los Ángeles, las ágatas y el cuarzo transparente -cristal de roca-. También la piedra semipreciosa amatista ayuda a conectar con los Ángeles. Estas piedras semipreciosas o gemas pueden utilizarse en pendientes, pulseras, colgantes en el cuello o como ofrendas en diversos sectores de nuestro hogar.